Ganando tiempo

Folio blanco, lineas negras bien claras y definidas. Te quiero y quiero aprovechar todo el tiempo que tengo disfrutando de tí, de esta dulce locura, de tus besos y de tus ojos.
No pasa nada si de repente puedo decírmelo en voz alta que me tienes más que enamorada, que me gustaría poder pasar contigo cada minuto de mis horas, compartiendo cada iniciativa que nos ocurra y por supuesto cada noche de nuestro verano.
Si la luna me sigue sonriendo, es bueno y no hay de que preocuparse. Me habría regañado, como solía hacer en pasado. Pero lleva ya tiempo contemplando mi jugada, mis palabras. Irrumpe en mis pesadillas para tranquilizarme y susurrarme que todo va bien.
Cada vez que nos besamos mientras ella está despierta, la veo quedarse silenciosa y sonreír desde su balcón...
¡Me miro por dentro y me veo a mí misma, finalmente feliz! Me veo alrededor y contemplo el amor del que me alimentas!

Parajes inesperados

Un baño lunar que no te esperas, un paseo nocturno por cráteres planetarios, una tormenta de relámpagos en el horizonte, al fondo...grandes rayos de luz blanca que amenizan la noche bajo una manta de estrellas luminosas y nubes claras. Los minutos pasan rápidos, al compás de las olas golpeando las rocas.
Una estrella fugaz, enorme y asombrosa, llegada desde muy lejos, nos quita las palabras y pinta en nuestras caras una expresión de sorpresa y maravilla, una sonrisa resplandeciente dibujada en el cielo oscuro, que nos une en un abrazo tierno y revelador. Dos siluetas, una detrás de la otra,  se abrazan en un encuentro fuera del tiempo y del espacio y se vuelven testigos de una noche especial.
Una cuesta hacia arriba que exorciza una pesadilla recurrente, al final el cuerpo no se despega de la tierra, sino todo lo contrario: ese núcleo terrenal hace de adhesivo entre esos cuerpos y esas manos.
Unas manos hermosas, fuertes y sensibles, un juego de caricias y mimos que empieza por los dedos y que sigue por los palmos, enredándose por las muñecas y subiendo hacia los brazos.
Una cascada de rizos que se esconden de una mirada limpia y emocionada, unos ojos azules pequeños, pero a la vez profundos y vivos.
Un beso atrapado en un paseo lunar en el que simplemente sobraba por lo sublime que había sido ese intenso baño de palabras y pasos.

Vita di un fungo

Da quando sono un fungo mi sento piccolo e colorato, allegro, poetico ed a volte malinconico. Cammino per la strada guardando il cielo azzurro, godendo e ricercando il sole caldo, regalando sorrisi ed ironia.
Sono un fungo rispettuoso, curioso e simpatico. Appaio strano all'inizio ma la mia transparenza alla fine si rivela la più saggia e preziosa delle mie virtù.
Ho un fungo in testa da due settimane, l'ho fatto mio e me ne rallegro. Ho cercato di rifiutarlo ma non mi è possibile ignorarlo. Quindi lo accarezzo e faccio crescerlo sempre di più.
Da quando sono un fungo a volte piagniucolo ma più spesso sorrido. Mi faccio coraggio ed intraprendo cammini che non immaginavo. Mi ha generato forza e spenzieratezza, incoscenza a volte.
Quindi il fungo manda messaggi inequivoci e diretti che sicuramente sorprenderanno più di uno. Anche lui si sorprende ma continua a sorridere. Alla fine ha capito che il tempo vola, dura il tempo di un taglio di capelli, di un sorriso o di una carezza.
Il fungo ha captado uno sguardo sincero e dolce e ha deciso di provare a rivederlo, ad incrociarlo di nuovo...vuole sentire la pressione di quelle braccia forti e di quel petto grande e fermo, così sensuale e allo stesso tempo rassicurante.
Non ha paura di scriversi con il suo passato nè di andarsene al cinema da solo. Da quando sono un fungo mi introduco nelle case altrui movendo oggetti e mobili per cercare di immergermi in quel determinato spazio e mescolarmi alle molecoli di quella spazialità. Il fungo si guarda attorno attonito, silenzioso ...sembra aver perduto la paura per volare alto o lontano o per contemplare una foto che il passato ha inviato da un viaggio nel presente.
Da fungo lo so che poter posarmi sulle tue labbra e perderci nei nostri sguardi sarebbe il regalo più romantico che questi primi giorni del nuovo anno potrebbero regalarci...per questo il fungo ti dedica queste note d'amor...le senti?